Salì de la cancha de Villa mitre (otra vez de visitante) con la sonrisa de oreja a oreja, con los ojos llenos de futbol, es que hacía muchos años que no se veía un conjunto rojinegro con tanto volumen de juego.
El domingo pasado tuvimos una pequeña muestra de lo que podía dar este equipo en la victoria por 3 a 1 sobre Pacifico en Cabildo, pero lo de ayer fue un espectáculo que ni el mas fanático se imaginó, el rojinegro hizo un primer tiempo de permanente control del balón, al que solo le faltó plasmar en la red la inmensa superioridad que tuvo sobre su rival (11 llegadas y 1 gol). El segundo tiempo se “abrió” el arco y permitió que el equipo de mono se floreara, fue 5 a 1, podría haber sido mayor la diferencia.
Paso la segunda fecha, dos victorias como visitante, ocho goles a favor, alguno nos preguntará si empezamos a soñar con el campeonato, yo le respondería que los negros nunca dejamos de soñar
Jeva, el primero
Beto, el segundo
Beto el tercero
Jeva, el cuarto
Marcos, el quinto
4 comentarios:
Felicitaciones!
Lo que es yo... fútbol, nooooo!!!
gracias Daniel! usted no era el que cuando nos ganaron en la bombonera, no habia manera de aplacar su festejo futbolìstico?, vaaaaaamos...
Ya se parecen a Riv... ah, no, pará, cierto que venimos empatando nomás. :/
Ricardo le perdono la comparaciòn porque compartimos esa costumbre del interior de ser hinchas de uno de aca y otro de allà, del decano ni hablemos ¿no?
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